Pero al final la hemos encontrado en un nido muy antiguo que hacía años que no utilizaba. Ahora como es natural está incubando y al estar echada es casi invisible pero es posible verla cuando la pareja hace los cambios para alimentarse.
Es un nido muy bueno, porque aunque está muy lejos, ofrece una perfecta perspectiva. Espero que este año podamos tomar unas buenas imágenes de cebas y al igual que el año pasado, seamos testigos de nuevo del primer vuelo de una de estas impresionantes aves.
La que nos está dando más guerra es la pareja de Alimoches Neopron percnopterus que anda por esta zona. No somos capaces de dar con el nido....pero todo se andará.
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